¿Hollywood sin ideas? Reboots, remakes y revivals del cine
- Fede Bogado
- 28 may 2020
- 5 Min. de lectura
Últimamente, “Hollywood se está quedando sin ideas” es una frase que estamos acostumbrados a escuchar. La crítica hacia la producción de las mismas películas una y otra vez se hace más fuerte y, sin importar las quejas, son cada vez más exitosas en términos financieros y se imponen ante los largometrajes originales que tanto se reclaman. A pesar de que se coloquen a todos estos filmes tan amados y difamados a la vez en la misma bolsa, no todas estas películas están hechas bajo el mismo concepto. Es allí donde aparecen los 3 términos de los que voy a hablar: reboot, remake y revival.
Reboot es un término en inglés que, según el diccionario de Cambridge, significa "Hacer algo de nuevo, de una forma nueva e interesante". En el cine, se utiliza para aquellas películas que toman como fuente a otra producción y hacen una historia totalmente distinta, cambiando distintos elementos que van desde el género cinematográfico hasta el propósito de la misma. Los reboots son comunes en grandes franquicias cinematográficas, para así “reiniciarlas”, como James Bond o Planet of the Apes.
Por un lado, un ejemplo de un reboot exitoso es Batman Begins (2005), dirigida por Christopher Nolan (Memento, Inception) y protagonizada por Christian Bale (American Psycho, Vice). En la misma, se cuentan los orígenes del superhéroe de DC Comics mientras enfrenta a Ra’s Al Ghul y Scarecrow, diferenciándose así de las películas previas basadas en el Caballero Oscuro. La película fue aclamada por los especialistas y la audiencia, destacando la actuación de Bale y el guión de la cinta, que respeta la esencia del personaje de los cómics satisfactoriamente. La película tuvo dos secuelas: The Dark Knight (2008), considerada como una de las mejores películas de superhéroes de todos los tiempos, y The Dark Knight Rises (2012).

Posters promocionales de Batman Begins (2005) y Ghostbusters (2016).
Por otro lado, un reboot no tan popular es el de Ghostbusters (2016), dirigido por Paul Feig (Mad Men, The Office) y protagonizada por Melissa McCarthy (Gilmore Girls, Bridesmaid), entre otras. El filme se basa en aquella producción de culto de 1984 del mismo nombre, siendo la principal diferencia que, en esta oportunidad, los caza-fantasmas son mujeres, causando polémica en algunos y entusiasmo en otros. La película recibió críticas mixtas, siendo elogiados los efectos especiales junto con la actuación de Kate McKinnon y Chris Hemsworth, mientras que los puntos negativos resaltados son el guión y la actuación del resto del elenco principal. Debido a que no recaudó lo esperado en la taquilla, se cancelaron las secuelas previstas y se produjo una secuela de la saga original de Cazafantasmas, llamada Ghostbusters: Afterlife, próxima a estrenarse en 2021.
El término en inglés remake, según Cambridge, significa “Producir algo nuevamente”. Éste se utiliza en cine para hablar de aquellas nuevas películas que son fieles a producciones anteriores y representa la mayoría o todos los aspectos de la película base. Su razón de ser es utilizar nuevas tecnologías para perfeccionar la historia o llegar a un nuevo público, pudiendo modernizar la fuente.
Un remake exitoso fue el de Scarface (1983), dirigida por Brian De Palma (Mission: Impossible) y protagonizada por Al Pacino (The Godfather, The Irishman). Esta cinta, que narra la historia del mafioso Tony Montana, en un remake de la peli del mismo nombre estrenada en 1932, dirigida por Howard Hawks y protagonizada por Paul Muni. Recibida negativamente al momento de su estreno por la violencia gráfica, con el tiempo se ganó críticas positivas y el estatus de “película de culto”.

Posters promocionales de Scarface (1983) y The Lion King (2019).
Por el contrario, un remake que no fue amado por su público es el de The Lion King (2019), dirigido por Jon Favreau (Iron Man) e inspirado en el filme animado de 1994. De esta cinta hablo específicamente en otro posteo del sitio, que pueden leer haciendo click acá.
El último término utilizado en lenguaje cinematográfico es el de revival, que refiere a aquellas producciones que traen de vuelta actores, personajes e historias de otras películas, dándole una continuación tiempo después del estreno del material original. Los revivals son comunes en series, siendo un ejemplo de ello la sitcom de Netflix Fuller House, que trajo de regreso la historia de los personajes protagonistas de Full House (1987-1995). Sin embargo, hay varios casos de películas que siguen esta idea.
Una de ellas es Blade Runner 2049, estrenada en 2017 y dirigida por Denis Villeneuve (Sicario, Arrival), que trae de vuelta la historia y personajes de la cinta de culto Blade Runner (1982). En ella, el oficial K, interpretado por Ryan Gosling (The Notebook, La La Land), decide buscar a quien cree que es la clave para descifrar un misterio que puede sembrar el caos: Rick Deckard (protagonista de la primera cinta, personificado por Harrison Ford). Tanto Ford como otros actores regresaron para esta nueva aventura, mientras que el director de la Blade Runner original, Ridley Scott (Alien, Gladiator), tomó el rol de productor ejecutivo. La película fue elogiada por crítica y audiencia por su guión, estética visual y dirección. Blade Runner 2049 ganó 2 premios Oscar en 2018, a Mejor Fotografía y Mejores Efectos Especiales.

Imagen promocional de Blade Runner 2049 (2017).
Los reboots, remakes y revivals son modelos de películas muy frecuentes en la actualidad, provocando que muchas personas acusen a Hollywood de “quedarse sin ideas”, como mencioné anteriormente. No obstante, no son cosa del presente, ya que figuran en cartelera hace varios años. Existen tres razones por las que estas películas han vuelto en la actualidad:
La tecnología avanzada: En el pasado, producciones se vieron limitadas creativamente debido a que la tecnología de ese entonces no les permitía plasmar en pantalla su creatividad al 100%. En la actualidad, la situación ha cambiado gracias al motion capture y el CGI modernos, por lo que algunas productoras deciden volver a realizarlas y aprovechar las innovaciones tecnológicas que tienen a su alcance.
Factor Nostalgia: Los largometrajes suelen ambientarse en tiempos pasados, elementos con las que otras generaciones han convivido. Por lo tanto, las películas suelen funcionar como “máquina del tiempo”, para traer a los espectadores de regreso a esa época de sus vidas.
Dinero: El motivo más conocido, ya que todos sabemos que la industria cinematográfica es una máquina de producir dinero, incluso dejando de lado la calidad del producto en algunas ocasiones.
En conclusión, podemos afirmar que los reboots, remakes y revivals no son cosa del presente, sino que existen y se publican desde hace varios años. Sin embargo, es verdad que se utilizan con más frecuencia que antes y destacan entre aquellos filmes con ideas originales. Es por ello que l@s invito a que busquen con más frecuencia, ya que siempre hay una nueva historia audiovisual para disfrutar, ya sea en nuestras casas como en el cine, cuando tengamos la oportunidad de ir.
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